Lo sucedido en Tucumán hace 10 días, donde una niña de 11 años fue forzada a cursar un embarazo producto de una violación, y posteriormente sometida a un procedimiento médico a destiempo, es un grave ejemplo de vulneración de derechos fundamentales. Este caso emblemático, muestra las dificultades que todavía se presentan en todo el país para cuidar a las niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual y ofrecer todos los recursos ya definidos en las normativas y políticas vigentes.
UNICEF alertó en el #8M sobre los derechos de las niñas victimas de abuso sexual
En este contexto, UNICEF Argentina llama a cumplir con la ley y a reforzar el Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia (Plan ENIA), una política pública que debe ser profundizada y cuidada de interferencias que dificulten su plena implementación.
UNICEF Argentina insta al Gobierno Nacional a continuar reforzando el Plan ENIA para garantizar los derechos sexuales y reproductivos de los y las adolescentes y fortalecer las políticas para la prevención del abuso, la violencia sexual y el acceso a la interrupción legal del embarazo, según el marco normativo vigente en el país. En la misma línea, convoca a las provincias que aún no lograron implementar esta política, a que adecúen sus instituciones para su efectivo funcionamiento.
El Plan ENIA genera un cambio en la forma de trabajar de los distintos ministerios involucrados y en la cultura de cuidado de las adolescentes: es una estrategia para superar la distancia entre las normativas de avanzada que existen en Argentina y las prácticas cotidianas que obstaculizan el ejercicio de derechos.
El país registra anualmente cerca de 2500 nacimientos de niñas de menos de 15 años.
A través del ENIA el Estado define institucionalmente cómo deben contenerse aquellos embarazos que son forzados, producidos por un abuso sexual, y centra la discusión en la protección de las niñas.
UNICEF Argentina acompaña y brinda apoyo al desarrollo e implementación de esta política pública para que pueda sostenerse a lo largo del tiempo y continuar garantizando, desde las propias estructuras institucionales, los derechos de las niñas y adolescentes.
Hace más de 40 años la Asamblea General de Naciones Unidas designó oficialmente el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer. Hoy se refuerza la lucha para lograr la igualdad de las mujeres, su pleno reconocimiento y el ejercicio efectivo de todos sus derechos. Nada de esto es posible para las niñas madres.