Se aproxima la temporada turística de verano y la región cordillerana es uno de los destinos favoritos de turistas que llegan a la zona a disfrutar de las mejores vistas, espectaculares paseos, cálidos alojamientos y gastronomía característica de la zona. En este sentido, San Martín de los Andes es una ciudad que reúne todas estas características para brindar una experiencia inigualable a sus visitantes.
San Martín: miradores únicos en cercanía al casco urbano
El Circuito Arrayán posee un mirador con espectaculares vistas panorámicas, a pocos kilómetros de la ciudad de San Martín de los Andes.
Es así que, cada año, según la época del año, la propuesta de actividades varía y se adapta a las condiciones climáticas de la región. En verano, al clima invita a disfrutar de paseos al aire libre y disfrutar de las playas, lagos, bosques y montañas que tiene San Martín de los Andes.
Una de las propuestas ideales para aprovechar durante los meses más cálidos del año, cercano al casco urbano y para toda la familia, es el paseo del Circuito Arrayán, el cual posee espectaculares miradores desde los cuales podrán apreciar la magnitud del lago Lácar y una panorámica de la ciudad.
Este paseo es sencillo y se puede acceder con vehículo, aunque si no se presentan impedimentos físicos se recomienda hacerlo caminando y disfrutar del recorrido. Sea cual sea la manera elegida, se deberá tomar el muelle turístico en la Costanera del lago Lácar, desde el cual parten las excursiones lacustres, como punto de partida.
Luego, trescientos metros a la izquierda se bifurcan los caminos: a la derecha se encuentra la Ruta Nacional 40, que llega a la ciudad desde Junín de los Andes para mutar en Avenida Koessler primero, la céntrica Avenida San Martín después, y luego volver a su denominación original, ya transformada turísticamente en la Ruta de los Siete Lagos, y tomando la mano izquierda se llega a los miradores.
Mirador Arrayán
Durante el ascenso hacia el mirador, lo primero con lo que se topará el visitante de la mano derecha serán los restos edilicios del ex Hotel Sol de los Andes. Luego, unos metros más adelante, ya en camino de ripio, la ruta continúa por el trayecto principal que continúa en ascenso y rodeado de cipreses, hasta que en cierto punto el lago comenzará a asomar entre los árboles.
En este lugar, se toparán con modernos miradores con barandas, rampa para discapacitados e ilustrativos carteles informativos, lo cuales brindarán una postal de ensueño, con una panorámica vista de la ciudad abajo, el muelle y los barcos, el cerro Bandurrias al frente, rodeado de cordones montañosos, bahías y bosques.
Luego, llega el camino de retorno, en descanso, el cual se puede complementar con una visita a la antigua casona de troncos convertida en casa de té, "Casa de Té Arrayán" cuya historia y espectaculares ventanales al lago atraen a todos los vistantes.
Aquellos que decidan visitar este lugar en auto o bicicleta, pueden continuar y seguir disfrutando de una nueva y espectacular vista panorámica un centenar de metros más adelante, sobre un abrupto precipicio que parece cortado sobre el lago. Luego, un par de kilómetros más, el camino se bifurca nuevamente generando dos opciones: el llamado “Arrayán Corto”, que a la derecha desciende hasta el kilómetro ocho de la ruta nacional 40 ex 234 (tomado desde San Martín de los Andes) o el “Arrayán Largo”, que unos metros adelante se abre también a la derecha, pero saliendo al km 11 de la ruta, para luego desde allí retornar por el asfalto hasta el casco urbano.