Desde el sector de Epidemología de Zona Sanitaria IV, salieron a aclarar que clase de insecto es el que se encontró por estos días en diferentes espacios de la localidad. Ante las consultas por una posible invasión de Vinchucas, informaron que se trata Chinche pata de hoja, la misma que tiempo atrás había aparecido en Junín de Los Andes.
San Martín: Desmienten que haya una invasión de vinchucas en la ciudad
Desde el sector de salud aseguraron que durante los últimos días se han constatado varias consultas referidas a la presencia de un insecto similar a la Vinchuca. Muchos vecinos se hicieron eco de la presencia de este insecto y para evitar posibles especulaciones sobre una invasión de Vinchucas, desde Zona Sanitaria IV, salieron a aclarar de que se trata.
Mediante una nota publicada en la página del Centro de Ecología Aplicada de Neuquén (CEAN), la doctora especialista María Fernanda Hadad, perteneciente al sector de Epidemología de Zona IV, aclaró que se trata Chinche pata de hoja (Leptoglossus spp.) o también conocida como Chinche de los frutales, chinche de campo o como en algunos lugares se los llama, debilitadores de ramas.
Según explicó Hadad, estas Chinches se distribuyen desde el sur de Canadá hasta Chile y Argentina. El llamado “Leptoglossus chilensis” habita en Argentina y Chile y es ésta, la que apareció tiempo atrás en Junín de los Andes, causando revuelo.
Según la descripción, este insecto es de color pardo de entre 13 y 15 mm de largo en su estado adulto. “Son de forma ovalada, con antenas compuestas por cuatro segmentos. Tiene una banda transversal ancha, de color amarillo oscuro. Las patas posteriores alargadas y ensanchadas en la sección de las tibias”, especificaron.
Si bien aclararon que pueden asustar debido a su parecido con la vinchuca, insecto transmisor de la enfermedad de Chagas, el cual se alimenta de sangre, hay diferencias con los insectos que se encuentran hoy en San Martín en cuanto a diferencias en su anatomía, colores y aparatos succionador.
En este sentido se intenta llevar tranquilidad a la comunidad sanmartinense respecto de la presencia de estos bichos, que según explican están adaptadas para sobrevivir a bajas temperaturas por debajo de corteza de los árboles o en las grietas de los suelos, por lo que podrían estirar su estadía en la localidad.