Comenzó la temporada de verano en Villa La Angostura y los comerciantes comienzan a sentir el impacto de la llegada de los visitantes. Desde el local chocolatero destacan las ventas dentro del negocio y vaticinan un buen enero.
Punto Chocolate vivió un diciembre prometedor y aumenta las expectativas de cara a la temporada verano
“Si no cierran nada me parece que va a ser una gran temporada para todos, va a ser algo muy bueno, diciembre fue genial” celebró el chocolatier Sebastián Grupicco.
El dueño de Punto Chocolate, señala que los clientes eligieron las tabletas de chocolate con almendras, las cuatro variedades de turrones, los alfajores y se sorprendieron por la recepción del pan dulce de almendras, chips y baño de chocolate. “Se vendió muy bien, hasta estoy sorprendido, nos quedamos sin”, señaló.
Diciembre también se vivió con el lanzamiento de dos tabletas que estaban pensadas para marzo, pero decidieron adelantarse. Se trata de una tableta de 70% cacao y sal del Himalaya y una de 62% cacao y jengibre.
Grupicco aclara que el éxito se vio reflejado en todos los productos y lo atribuyen a la buena calidad del chocolate, libre de aceites hidrogenados. “Hay una elección natural del gusto de cada persona, pero compran todo y la gente vuelve, muchos nos han comprado de Cumelen”.
Los números lo hacen ver con expectativa la llegada de enero y anticipa: “Nos preparamos para una gran temporada, siempre y cuando no tengamos ninguna sorpresa con el tema del coronavirus”.
Su principal sorpresa se debe a los números a pesar de no estar en la avenida principal. “Al estar un poco más alejados, no teníamos pensado que iba a venir mucha gente y nos está sorprendiendo para bien”.
La afluencia de gente, obliga a los comerciantes a extremar sus protocolos. En el caso de Punto Chocolate, Grupicco detalló: “El local tiene la puerta abierta y tenemos una barrera en la cual tenemos un metro de distancia, contamos con dispenser de alcohol al 70%, trabajamos con mascara y barbijo y después limpieza y desinfección de toda la fábrica”.
“Usamos amonio cuaternario, y tenemos en la fábrica un ionizador de aire, que sirve para desinfectar, trabajamos mucho con el tema de la prevención, tratamos de extremar los cuidados lo más posible, pero la realidad es que no estamos exentos a que nos pueda llegar a pasar algo” aclaró.