El puerto de Acapulco, ubicado en la costa del Pacífico de México, quedó incomunicado en las últimas horas a causa del poderoso huracán Otis, el cual provocó bloqueos en las vías de acceso, cortes en los servicios de energía y comunicaciones. Esta situación ha dificultado considerablemente la capacidad del gobierno para evaluar la magnitud de los daños. Hasta el momento, se han reportado al menos 27 víctimas mortales.
Además, se han registrado daños materiales significativos, como deslizamientos de tierra que han bloqueado la autopista que conduce a Acapulco. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó sobre esta situación durante su conferencia de prensa matutina. A las 15:00 GMT, el huracán Otis, que alcanzó la categoría 5 con vientos de más de 250 km/h durante la pasada medianoche local, se encontraba a 160 km al noroeste de dicho destino.
En ese momento, había disminuido a categoría 1 con vientos sostenidos de 130 km/h y avanzaba a una velocidad de 17 km/h, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC). El presidente López Obrador señaló que el gobierno trabaja para restaurar las comunicaciones en la zona afectada y envió un convoy de ayuda humanitaria liderado por los ministros de Defensa, Marina, Seguridad y Comunicaciones hacia el puerto, ya que las condiciones climáticas impidieron llegar por vía aérea.
La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, subrayó la dificultad de proporcionar cifras exactas de heridos o fallecidos debido a la falta de comunicación y la magnitud de la destrucción. Además, destacó que tanto la Marina como el Ejército resultaron seriamente afectados. El sur de México es afectado por los fuertes vientos e intensas lluvias de Otis, lo que podría dar lugar a inundaciones y deslizamientos de tierra en más lugares.
Desastre natural en México
La empresa eléctrica estatal, CFE, logró restaurar el suministro eléctrico para el 40% de los más de 504.000 usuarios afectados en el estado, la mayoría de los cuales se encontraban en Acapulco. En redes sociales y medios locales, se difundieron videos que muestran cómo las palmeras, árboles y mobiliario urbano fueron azotados por los vientos y las lluvias del huracán Otis. Algunos comercios sufrieron daños, con ventanas destrozadas y turistas improvisando protecciones con camas y colchones en las ventanas de los hoteles. Otros buscaron refugio en los baños.
A medida que Otis se adentra en la zona montañosa del estado de Guerrero, perderá fuerza y se espera que se disipe en la noche de hoy miércoles. La rápida intensificación del huracán tomó por sorpresa a las autoridades y a la población de los estados afectados, especialmente Guerrero. El presidente López Obrador destacó que, según los registros, es poco común que un fenómeno de este estilo adquiera tan rápidamente una fuerza tan devastadora.