En la antesala de lo que será el inicio de un nuevo ciclo lectivo en Villa La Angostura y aún con incógnitas acerca de la total presencialidad en las aulas, las colonias de verano en la localidad han aumentado su importancia en el marco de la sociabilización de los chicos, la relación sus pares y el aprendizaje.
Los más pequeños disfrutan de la colonia del Deportivo Angostura: “Están muy felices los chicos, necesitaban este espacio”
Si bien algunas de las propuestas pensadas para este verano no han podido prosperar ante el aumento de casos de Covid-19 y la circulación comunitaria del virus, el caso de la colonia del Club Deportivo Angostura ha sido un ejemplo en el esfuerzo y dedicación de sus profesores para brindarles un lugar de recreación a los niños.
“Los chicos están muy felices. Necesitaban este espacio”, afirmó Julia De Loredo, coordinadora de la Colonia del “Depo” a Diario 7 Lagos, y amplió: “Nos fue muy bien, comenzamos el primero de diciembre dando la oportunidad a los chicos de sociabilizar y disfrutar de nuestro entorno. Todos los días continúan sumándose chicos nuevos”.
Cabe destacar que junto a Julia trabaja Cecilia Muñoz, la otra coordinadora y docente de jardín de infantes, que se encuentra planificando las actividades a diario junto a los profesores y está con los chicos. Los profes y auxiliares son Abril Sisterna, Rodrigo Cayunao, Mateo Solis y Diego Zuñiga.
El horario es de lunes a viernes de 9 a 13 horas, para niños de 5 a 11 años en la sede del Puerto de la institución. Con un balance más que positivo, la coordinadora explicó que “se aprovechó estar en ese lugar para hacer muchas actividades desde ahí, tales como caminatas a los miradores, a la laguna verde y por las diferentes bahías”.
“Además, visitaron el museo, tuvieron charlas con el guardaparques, con prefectura, hicieron bicicleteadas, kayaks, de todo”, añadió De Loredo, quien explicó a su vez que la colonia ha tenido que frenar “cuando explotó el Covid en la localidad”, pero solo se pararon las actividades una semana “para reorganizarnos, armar las burbujas y revisar los protocolos”, en palabras de Julia.
Por otra parte, la coordinadora adelantó a este medio que se está evaluando la posibilidad de que durante el año “se arme un espacio de vida en la naturaleza con salidas esporádicas, para no perder el entusiasmo de los niños por la actividad física y la relación con el bosque”.
“Los profes, que son profesores de educación física y la coordinadora maestra jardinera, le dieron mucha impronta al cuidado del medio ambiente y a las relaciones entre ellos, ya que muchos se pasaron todo el año entre adultos. Salieron cosas muy lindas”, remarca Julia.
Así, lo desarrollado hasta el momento por la colonia que continuará hasta finales de febrero va en lineamiento con lo planteado en un principio por el club: hacer foco en la “vida en la naturaleza”, “el deporte” y “el juego”.
Con caminatas en las playas, natación kayak, bicicleteadas entre otras cosas, la rutina de los niños que asisten ha cambiado por completo a lo que ha sido un año difícil sin poder estudiar en el aula.