Por acuerdo entre el fiscal del caso Adrián de Lillo y la defensa del imputado, Ramón Miguel Rivero fue condenado a la pena de tres años y ocho meses de prisión efectiva por cuatro hechos ocurridos en Villa La Angostura.
Le imponen 3 años y 8 meses de prisión tras unificación de pena por cuatro hechos ocurridos en la localidad
En una audiencia de control de acusación realizada mediante videoconferencia entre Junín de los Andes y Villa la Angostura, el juez de garantías Juan Balderrama, homologó el acuerdo pleno al que arribaron las partes y que contó con el consentimiento del imputado.
El magistrado entendió como razonable la pena: “se cumplen todos los requisitos para el dictado del acuerdo pleno que se me propone, la materialidad del hecho y la relación de participación del imputado”, indicó.
Ramón Miguel Rivero fue declarado penalmente responsable por cuatro hechos ocurrido en la localidad de Villa La Angostura. Todos concurrieron en forma real (artículo 55 del Código Penal).
El primer hecho fue el ocurrido el 1 de abril de 2016, calificado como el delito de portación de armas de fuego de uso civil condicional sin la autorización legal en calidad de autor (artículos 189 bis inciso segundo; párrafo cuarto y quinto, con la disminución del párrafo quinto y 45 del Código Penal).
El segundo hecho ocurrido el 20 de julio de 2018 y el tercero el 31 de julio, calificados como amenazas agravadas por el uso de armas de fuego en calidad de autor (artículos 149 bis párrafo primero y 45 del Código Penal.)
Un cuarto hecho ocurrido el 2 de agosto de 2018 calificado como portación de armas de fuego de uso civil sin la debida autorización en calidad de autor (artículos 189 punto dos párrafo tercero y 45 del Código Penal).
El imputado fue condenado por un fallo emitido de 2015 de un Tribunal en la ciudad de Neuquén, a la pena de dos años de prisión condicional. Al unificar todos los hechos en la audiencia, se le impuso la única pena de 3 años y 8 meses de prisión de efectivo cumplimiento.
Debido a que el imputado se encuentra cumpliendo prisión preventiva y las partes renunciaron a los plazos de impugnación, empezó a cumplir la pena a partir del viernes pasado.
En la defensa del imputado estuvo la defensora oficial María Sol Valero.