Así lo afirmó Martín Suero, dueño del Hotel angosturense Las Ramblas de Puerto Manzano (@lasramblas.villaangostura) y creador de atractivos inéditos y de estándares internacionales para la localidad. “Con todo aún cerrado y el estado del sector, acompañando la última comunicación de FEHGRA estamos en un estado terminal y la gastronomía agoniza”.
La crisis de los hoteleros en Angostura se acentúa: “Al no ver una clara estrategia de apertura no se terminan de concretar las ventas de verano”
Martín explica que es “el segundo invierno consecutivo que se pierde y aún se siguen pagando deudas anteriores”: “Necesitamos reglas claras de acá al verano por parte de las autoridades para saber cómo encarar las inversiones para la reapertura después de este invierno tan duro”, remarca el Hotelero.
Al ser consultado sobre si ha mantenido contacto con la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Villa La Angostura, Suero explica que “la comunicación con los socios ha sido constante y de manera cotidiana, muy consensuada”. En su caso, estuvo totalmente de acuerdo con los pedidos presentados y añade: “No hemos recibido respuesta de alivio a ninguno de los reclamos, por ejemplo, no hemos logrado que nos cobre de forma diferencial la luz y el gas siendo que los comercios han estado cerrados de forma obligatoria”.
Por tal motivo, Martín considera esencial que la ley de Emergencia para la actividad turística se dicte cuanto antes: “es vital para un sector que estaría dispuesto a mantener y generar nuevos puestos de trabajo desde el día que la actividad se reactive nuevamente”.
Cabe destacar que el Hotel Las Ramblas presenta numerosas opciones para los turistas y servicios excelentes para la estadía. Como mayores novedades, desde Las Ramblas ofrecen el “Glamping”, el cual conlleva burbujas transparentes y pirámides de vidro. Suero detalla que los meses de invierno, por una cuestión meramente del frío y del clima, “se desarman esas habitaciones que funcionan como hotelería el resto del año y se convierten en una experiencia de Resto Iglú Bar”.
“Este es un año espectacular de nieve. Ya teníamos incluso muchas reservas de agencia de turismo de Bariloche que llegarían a nuestra hostería con turistas para vivir la experiencia Iglú. No la pudimos inaugurar por falta de comunicación con rutas de Bariloche y por el marco de la pandemia”, cuenta Martín.
Pero agrega: “Sin dudas es la puesta que vamos a tener para el próximo invierno, durante el verano hotelería y durante el invierno el resto bar iglú, para quienes hayan pasado el día en Cerro Bayo y quieran vivir la experiencia o para turistas desde la agencia de Bariloche que vengan en combis y los traen para venir a pasar este momento divertido de una experiencia diferente”.
En el contexto actual, el hotelero cuesta que “nos está costando mucho prepararnos debido a las inversiones que tenemos que habíamos realizado antes de la temporada y por las pérdidas que nos ocasionó el temporal del invierno. Al mismo tiempo estamos tratando de invertir en los requerimientos que exigen los protocolos, que requerirán otra nueva importante inversión”.
Pero con relación a lo que se espera para la etapa post-pandemia, Suero ratifica que “lo mejor del complejo hotelero es su entorno natural” porque “da un marco de seguridad diferencial ante la situación que vivimos”. Entonces, “Sumado a la hotelería de bajo impacto ambiental por la cual somos conocidos contamos con la experiencia Glamping que es el boom del turismo post Covid en todo el mundo, con el plus de la experiencia de ver las Estrellas desde una buena cama”.
Y cierra, ante la alarmante preocupación que se distribuye por todo el sector turístico a lo largo del país: “el nivel de consultas para el próximo verano es muy alto, lo que aumenta las expectativas de trabajo”, aunque aclara que “al no ver una clara estrategia de apertura no se terminan de concretar las ventas”.