23 estaciones, placas en relieve y un mega Cristo Luz emergiendo de la cima de la montaña serán alguno de los atractivos que podrán encontrar aquellas personas que visiten Junín de los Andes. El parque temático Vía Christi (camino de Cristo) se encuentra en las laderas del Cerro Cruz, a pocos kilómetros del centro de la localidad, y durante los 2 kilómetros de camino pedestre, los visitantes podrán recorrer diferentes estructuras que representan la vida de Cristo.
Junín de los Andes: el recorrido por el Cristo
El Parque Escultórico Vía Christi en Junín de los Andes es uno de los grandes atractivos de la localidad y se esperan muchos turistas para Semana Santa.
La idea de este lugar es reflejar en cada una de sus 23 estaciones, lo momentos más destacados de la vida de Cristo. Esto lo vuelve un atractivo para el turismo principalmente en la época de Semana Santa. Para quienes lleguen a la localidad desde el sur de la Provincia (Villa la Angostura, San Martín de los Andes), deben tomar la Ruta Nacional 40 hasta llegar al centro de Junín de los Andes y doblar a la izquierda (con semáforo) en la Avenida Antártida Argentina. Luego, circular 700 metros aproximadamente hasta el estacionamiento en la entrada del Parque.
Este Parque Temático, que es uno de los grandes atractivos del turismo de la Provincia, combina elementos de la tradición católica y mapuche a lo largo de los dos kilómetros de camino. Las distintas estaciones, denominadas “solados”, son plazas de 12 metros de diámetro que se encuentran montadas sobre una plataforma que representa el sol. Dentro de ese círculo está la cruz americana (la misma que se puede ver en los ponchos pampa y en las culturas preincaicas) en la que se simbolizan las cuatro dimensiones de la vida.
Este Camino de Cristo convierte a Junín de los Andes en uno de los lugares de referencia para aquellas personas que desean pasar las Pascuas en la Provincia Neuquén. El recorrido comienza al pie del cerro De la Cruz y finaliza en la cumbre, gobernada por una cruz blanca. Todo el camino es acompañado por impresionantes obras de arte sacro, diseñadas por el arquitecto Alejandro Santana. Además la zona está rodeada por cientos de árboles del bosque patagónico que le dan al lugar un entorno único.