Es bartender, se perfeccionó en Europa e inició su proyecto en pandemia: “mi objetivo es agregar a Villa La Angostura en el mapa de la coctelería argentina”

En diálogo con Diario 7 Lagos, el joven de 22 años contó su historia y la decisión de comenzar su propio proyecto en plena pandemia por necesidad. Con una importante trayectoria y estudios internacionales en Europa, Tomás hace tragos originales y de autor y espera con ansías el regreso de los eventos para desplegar sus “barras móviles”.

“Yo fui a la escuela Jaime de Nevares, que tenía opción de gastronomía, turismo y hotelería. Ahí haciendo eventos, casamientos, empecé a ser ayudante de barman y me empezó a gustar. Hice mi primer curso cuando finalicé el secundario en Bariloche y luego agarré rodaje, y después de mucho esfuerzo, viaje a Barcelona a estudiar en la European Bartender School”, cuenta el emprendedor.

Según cuenta Dittler, dicha escuela es hoy en día “una de las mejores del mundo”, ya que desde ese establecimiento salen los mejores barman nacionales e internacionales. Incluso explica que el fue uno de los 21 que aprobó el curso, de un total de 104 inscriptos. “Cuando volví para acá, me fui a Buenos Aires para arrancar y ampliar un poco más el panorama”, relata el joven.

De esta manera, comenzó a trabajar en un local de Palermo Soho, en Buenos Aires. Tomás resalta que, en tres semanas, ya había llegado a ser jefe de barra, por lo que su horizonte se tornaba cada vez más claro, aunque su historia volvió a cambiar un día: “cuando me enteré de que iba a ser papá, volvió a la Villa y arranqué mi propio emprendimiento”, afirma.

Y agrega: “También empecé a competir en torneos de Coctelería profesional y Flair contra los mejores Barmanes de la Patagonia y organizar torneos en la Villa”. Aquí, nuevamente, se repite la meta de ubicar a Villa La Angostura cómo destino diferencial a la hora de pensar en tragos y cócteles.

En su emprendimiento, Petagonian Cocktails, Tomás prepara Cocktails en petacas listos para tomar y de autor. Además, cuenta con el servicio de las “barras móviles”, las cuales se contratan para otorgar un servicio de catering, pero únicamente de bebidas, “dependiendo del presupuesto y de la cantidad de gente se ofrece una determinada variedad de tragos”, explica Dittler.

“Siempre trato de salir de lo básico y agregar propuestas elaboradas. Caipirinhas, mojitos, y algún que otro trago de autor. Lo arranqué por necesitad, porque me quedaba sin trabajo. Esa es la realidad. Aprovechando que nadie lo hacía acá, buscaba diferenciarme de la competencia ya que son todos tragos propios los que busco hacer”, asegura.

En su catálogo, Tomás ofrece Caipirinhas de Yerba Mate, o incluso una bebida que tiene el sabor de un lemmon pie llevado a un trago, u otro similar al sabor de un helado de menta granizada. Con la cuarentena desplegada por más de siete meses, el comercio online fue uno de los puntos fuertes que impulsó el emprendimiento, aunque quiere ir por más.

“Por ahora mucho utilizo muchísimo las redes sociales, pero ya tengo turno en la Sala de Elaboración Municipal. Mi idea es iniciar los trámites para habilitarlo y ampliar la venta, poder comercializarlo en locales, restaurantes y todos lados. A eso apunto y ese es mi objetivo”, finaliza Dittler.