María Cristina Ganem y Marcelo Leonardo Nazra son nadadores de aguas abiertas que hicieron historia en Neuquén y a nivel nacional: cruzaron el canal de la Mancha luego de entrenarse en la pileta del club Santafesino y en las aguas del río Limay. Diario Neuquén dialogó en exclusiva con Marcelo Nazra (47), médico anestesista de Barrio Confluencia que nadó 15 horas para lograr su objetivo: atravesar al Canal y que su misión solidaria en su región sea escuchada.
Conocé al neuquino que cruzó el Canal de la Mancha por una misión solidaria para su ciudad
Los atletas nadaron 15 horas y 35 minutos, sin traje de neopreno con el objetivo de construir una pileta con un cupo preferencial para personas con discapacidad y rehabilitación en Neuquén.
Tras convertirse en los primeros neuquinos en unir las costas de Inglaterra y Francia, el Honorable Concejo Deliberante de la Ciudad de Neuquén declaró, el pasado 3 de octubre, de Interés Municipal la participación de los dos nadadores, transformándolos así en vecinos destacados de la región.
“Fue una experiencia muy enriquecedora”, sintetiza Marcelo. Se miden muchas cosas. Lo deportivo, que es para lo que uno se entrena; pero también en lo personal: la familia, el impacto social y el objetivo de hacernos escuchar para lograr la construcción de una pileta que otorgue la posibilidad de nadar a la gente con discapacidad”, explica el nadador a Diario Neuquén.
Marcelo afirma que logra combinar su actividad profesional de médico anestesista y la pasión por la natación: “yo nado hace 41 años”, detalla y agrega: “Empecé a los 6. Pasé por todas las etapas de la natación y de grande continué nadando. Sentí que era el momento de hacer grandes cosas, y se alinearon todos los planetas para que pudiera cruzar el Canal”.
Dos años fue el tiempo que el médico anestesista dedicó a su voraz entrenamiento para poder lograr su objetivo. “Fue una preparación en la que en mi casa solo se habló de natación”, recuerda alegremente y cuenta: “es estar todo el tiempo dedicado a la natación. Entrenaba entre tres y cinco horas diarias de agua, más la preparación física, la elongación, el kinesiólogo y el psicólogo”.
“Fue un proyecto familiar”, sostiene Marcelo. “Si la familia no te acompaña, es imposible realizarlo” cuenta y agradece a su mujer y a sus hijos por acompañarlos en la travesía. Sino te acompaña la familia… mis hijos iban a entrenar conmigo, con mi mujer íbamos para todos lados juntos.
Nazra reitera que la experiencia fue muy satisfactoria porque el fin es único: crear un lugar en Neuquén de carácter inclusivo, donde tengan prioridad las actividades de rehabilitación y las personas con discapacidad. Un “Nadando por un sueño”. Quien lo acompañó en este increíble cruce fue la nadadora Cristina (52), quien es arquitecta y campeona argentina de aguas frías.
Cristina nadó la milla helada en Ushuaia, los 7 Lagos en invierno y luego hizo la hazaña de Malvinas uniendo las dos islas. Marcelo, por su parte, participó en travesías tales como el cruce a nado en 7 lagos en invierno, el cruce del estrecho de Magallanes y competencias en aguas abiertas en Cuba y Chile entre otras.
El cruce del canal de la Mancha tiene una finalidad solidaria y así lo consideraron los concejales de la Ciudad. “Pensábamos con cristina que era el momento ideal si lo hacíamos, para que nos escuchen”, repite Marcelo. La natación nunca tiene tanta trascendencia a nivel nacional como otros deportes más populares.
“Fue el momento justo. Nos escucharon todos. Pudimos vislumbrar la necesidad de una pileta para personas con discapacidad. Neuquén es una ciudad muy grande donde se pueden hacer estas cosas: tener un lugar donde todos puedan disfrutar del agua.”, explica el médico anestesista con un inagotable amor hacia la natación. Marcelo cuenta que el proyecto ya comenzó y en dos o tres años será una realidad para Neuquén.
Fuente: Diario Neuquén