El verano 2021 vino en San Martín cargado de turistas, con un gran nivel de ocupación y con un alivio frente a los nueve meses de parate obligatorio que tuvo la Ciudad. Sin embargo, la pandemia también propone cambiar las reglas del juego y en esa transformación las combis son las grandes víctimas. Los cambios de hábitos de los turistas repercutieron directamente en una actividad tradicional de la ciudad.
Combis paradas, las grandes ausentes de la temporada en San Martín
Adrián Blanco, presidente de la Asociación de Viajes y Turismo de San Martín, le contó a Diario 7 Lagos que en esta temporada observan un cambio de hábito rotundo que afecta directamente a los trabajadores de transportes.
El hecho de no querer compartir transporte con personas desconocidas, algo que habitualmente se hace para abaratar costos, hizo que se vuelva realmente complicada la situación para los trabajadores del sector.
“El turismo tradicional está laburando a un 20%. La temporada es buena o mala dependiendo de donde estés parado, la gente consume alojamiento y gastronomía en algunos de sus formas, pero no consume medios de transporte o ciertos tipos de excursiones que corresponden al turismo tradicional: combis de excusiones o traslados al aeropuerto”, especificó Blanco.
Para Blanco esta situación precipitada por la pandemia marca un cambio “temporal y cultural” respecto de la forma de hacer turismo. Los cuidados son mucho más grandes y detallan que “3 de cada 4 pasajeros te preguntan por los protocolos que se usan para mover la combi”.
En resúmen se considera un cambio temporal ya que se estima que la situación podría volver medianamente a la normalidad con la llegada de la vacuna, y cultural porque a partir de esta situación muchos turistas repetirán esta lógica para moverse en el destino sin el uso de combis.
“Cuando aparezca la vacuna muchas de estas cosas van a quedar atrás, van a pasar y van a tender a volver a la normalidad, pero hay un cambio conductual que no va a volver atrás. En el rafting por ejemplo, ahora son los propios visitantes los que se mueven para llegar al lugar. Son cosas que llegaron para quedarse, la gente al darse que paga menos para ir, lo va a volver uso y costumbre”, consideró Blanco.
Las combis paradas terminan afectando a choferes, transportistas, agencieros, coordinadores y guía de turismo. Todo un sector se ve fuertemente golpeado por los cambios de hábito que la pandemia vino a instalar.