En su cumpleaños número 50, el 7 de noviembre de 2023, Martín Palermo, más conocido como "El Loco," recibió los saludos y el cariño de sus fanáticos en todo el mundo. Además de celebrar su nuevo año de vida, es un momento ideal para recordar los momentos más destacados de su legendaria carrera como jugador de Boca Juniors. Sin dudas, uno de los máximos ídolos no sólo del "Xeneize", sino del fútbol argentino.
El romance goleador entre Palermo y Boca Juniors comenzó a escribirse el 30 de septiembre de 1997, un día que quedó grabado en la memoria de los hinchas. En ese partido, el cuadro de La Ribera derrotó 2-1 a Independiente en La Bombonera, y Martín sólo necesitó treinta segundos para mostrar su talento. Ese gol fue un presagio de lo que vendría en su carrera, lo que llenó de optimismo a los aficionados. Se encontraba casi en el punto de penal, cuando la pelota rebotó en un jugador rival y quedó en sus pies, marcándole al portero Mondragón.
Otro momento inolvidable ocurrió en la última actuación oficial de Diego Maradona como futbolista. Boca comenzó abajo en el marcador en el estadio Monumental, pero Palermo se hizo presente en el resultado al anotar el gol del empate. Este momento fue especial, ya que ocurrió en un contexto donde los hinchas del azul y oro pudieron despedir a su ídolo como se merecía.
Logros históricos de Palermo en Boca
En el Torneo Apertura de 1998, Boca Juniors se consagró campeón de manera invicta, y Martín Palermo fue una pieza fundamental en ese logro. El delantero anotó 20 goles en 19 partidos, además de romper el récord de goles en torneos cortos de la Primera División. Uno de los momentos más icónicos de su carrera se produjo también el 9 de mayo de 1999 en el Superclásico contra River Plate.
En ese partido, Boca derrotó 2-1 a su eterno rival en el Torneo Clausura. El gol de Palermo en ese encuentro se convirtió en un hito, y el legendario relato de Marcelo Araujo, que decía "$776.420 la recaudación para esta nueva edición del Superclásico del fútbol argentino... ¡Martíííííín, goooool!", quedará para siempre en la retina del hincha "Xeneize".
Por su parte, el 13 de noviembre de 1999, Palermo vivió una experiencia que se podría catalogar como una película. En un partido contra Colón en el Cementerio de los Elefantes, el Loco se lesionó gravemente en la rodilla derecha. A pesar del dolor, decidió no salir y, en lugar de eso, logró anotar su gol número cien con la camiseta de Boca. Fue un acto de valentía y determinación que conmovió a todos.
Una historia sin igual
En la Copa Libertadores, en un enfrentamiento de vuelta, el entrenador rival, Rubén Américo Gallego, decidió poner a Palermo en el campo, a lo que respondió: "Si ellos ponen a Palermo, yo lo pongo a Enzo". El partido estaba igualado, pero Martín volvió a escribir su nombre en la historia al marcar un gol que selló la victoria de Boca Juniors.
Otro hecho importante se dio el 28 de noviembre de 2000, en la Copa Intercontinental, Martín Palermo necesitó nada más que seis minutos para dejar su huella imborrable en la historia del fútbol mundial. Boca se enfrentó al Real Madrid en Japón, y el Loco anotó dos goles que contribuyeron a la victoria de su equipo. Gracias a su actuación, se quedaron con el título.
En otro episodio emotivo, el 6 de agosto de 2006, a pesar de la trágica pérdida de su hijo recién nacido, Palermo decidió jugar para Boca. Anotó el primer gol del partido y celebró con sus compañeros y el público en un momento profundamente emotivo. En el Apertura 2009, volvió a asombrar al mundo del fútbol con un gol de cabeza desde 40 metros contra Vélez, un logro impresionante que quedará en la historia como uno de los tantos más asombrosos de su carrera.
Finalmente, el 5 de junio de 2011, en su último partido con la azul y oro, Palermo anotó un gol muy particular desde una distancia considerable en el Centenario de Quilmes. Este tanto fue la despedida perfecta para uno de los máximos ídolos de Boca Juniors. Con su capacidad para marcar goles memorables en los momentos más trascendentales, se convirtió en una leyenda del fútbol argentino y en un ícono del club "Xeneize". Su cumpleaños es una oportunidad perfecta para celebrar su legado y recordar todos esos momentos que hicieron vibrar a los aficionados del deporte más popular.