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Artesanías Neuquinas invirtió más de tres millones de pesos en la adquisición de piezas

Artesanías Neuquinas invirtió durante este año un total de 3.284.032 de pesos en la adquisición de piezas artesanales realizadas en parajes y comunidades mapuche. La producción se comercializa en los locales que tiene la firma provincial en Neuquén capital, Buenos Aires y San Martín de los Andes.

Del proceso participan 540 artesanos de todo el territorio provincial. Recientemente finalizó el acopio de artesanías programadas en cada paraje y comunidad que forman parte de la cadena, lo cual requiere de un importante proceso de difusión para que la información de los cronogramas llegue a cada artesano y artesana.

La logística para recorrer el territorio se garantiza con la coordinación de diferentes referentes territoriales de la secretaria de Desarrollo Territorial y Ambiente.

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Recientemente finalizó el acopio de artesanías programadas en cada paraje y comunidad que forman parte de la cadena.

De esta manera el gobierno provincial acompaña la ruralidad con diferentes acciones que posibilitan que las familias permanezcan en el campo con una buena calidad de vida; así las actividades artesanales tradicionales –sobre todo en el área rural- es una alternativa para la generación de ingresos familiares.

De acuerdo a la información proporcionada por la administración de Artesanías Neuquinas, a septiembre de este año, la provincia lleva invertido un total de $3.284.032 en la adquisición de piezas. Los Departamentos Huiliches, Loncopue y Aluminé concentran la mayor cantidad de artesanos y artesanas -con 227, 94 y 133 trabajadores respectivamente- que venden sus producciones a la empresa neuquina.

En el caso del Departamento Huiliches –cuyas realizaciones fueron vendidas al Estado  por un total de 1.370.706,00 de pesos–  la producción se especializa en tejidos en telar de muy buena calidad y de colores intensos provenientes de tintes naturales, también se tallan madera obteniendo fuentes, cucharas, palas, juegos de cubiertos y otros confeccionan piezas de alpaca como aros, tupus y llaveros.

Mientras que en el Departamento Loncopue, la producción se concentra en los parajes de Huncal y Pichaihue. Se destacan tejidos teñidos por tintes de la veranada en la cordillera pero la estepa de la invernada también le aporta colores.

En tanto en el Departamento Aluminé, toda la producción que se compra es textil, allí las artesanas tejen en telar y a dos agujas, con un predominio de los colores blanco y negro, aunque hay un incipiente uso de tintes naturales, lo que se puede visualizar en tejidos de variados colores. Las piezas más destacadas son los caminos y carpetas, así como los chalecos, medias y guantes.

El trabajo artesanal involucra a varios miembros de las familias, incluyendo a niños, jóvenes y adultos.

Sobre la actividad

La artesanía es una actividad intensiva en mano de obra y con capacidad de generar empleo a bajo costo por cuanto sus requerimientos de infraestructura y equipamiento son mínimos: ruecas, husos, telares, gubias, lijas, hornos, sierras, entre otros.

Es una actividad económica que ocupa principalmente a integrantes de comunidades mapuche por cuanto los oficios artesanales de tejedoras, ceramistas, plateros y talladores de madera se caracterizan por la utilización de técnicas que son aprendidas en el hogar y conservadas en el tiempo mediante relevos generacionales.

Así la mayoría de los artesanos que produce artesanía tradicional vive en áreas rurales aunque también hay una cantidad importante residiendo en áreas urbanas que producen no solo artesanías tradicionales sino también artesanía contemporánea.

El trabajo artesanal involucra a varios miembros de las familias, incluyendo a niños, jóvenes y adultos que desempeñan tareas que suelen ser compatibles con su actividad escolar y otras actividades domésticas o productivas.

Cabe señalar que el sector artesanal es generador de trabajo productivo y de ingresos, ya que la producción y comercialización de la artesanía es una actividad que contribuye a mantener viva la tradición cultural, pero además contribuye a la generación de ingresos para numerosas familias lo que dinamiza la economía.

La producción artesanal también se comercializa en forma directa en espacios organizados comunitariamente.