En el marco de la proximidad a las festividades de Navidad y Fin de Año, los municipios de Villa La Angostura y San Martín de los Andes reforzaron su campaña de prohibición de uso de pirotecnia y recordaron a los vecinos que "está prohibida su venta" en toda la Provincia de Neuquén.
Angostura y San Martín sobre la prohibición de pirotecnia
En Villa La Angostura y San Martín de Los Andes reiteran a los vecinos la importancia de no emplear pirotecnia estas fiestas y recuerdan que está prohibida.
El caso de Villa La Angostura
En el caso de Villa La Angostura, la venta y uso de pirotecnia está impedida bajo Ordenanza Municipal N° 954/99.
"Los fuegos artificiales son una fuente potencial para los incendios, su uso aumenta significativamente el índice de riesgo forestal y estructural. Poseen un alto nivel pirógeno que, al entrar en contacto con material combustible (vegetación, residuos forestales, etc.) son capaces de generar un incendio", explican las autoridades municipales.
Y sostienen: "Quienes padecen el Trastorno del Espectro Autista, perciben los estruendos de una manera más intensa que los demás, debido a una hipersensibilidad a los sonidos en general. Esto les genera estrés, alteración conductual y emocional".
Además, añaden que son los animales quien también "sufren estrés debido a su sensibilidad auditiva; los ruidos fuertes pueden causarles pánico y provocar conductas no habituales como escapar sin rumbo y perderse, lastimarse, o lastimar a las personas": "Es importante destacar que es responsabilidad de todos cumplir y hacer cumplir esta Ordenanza Municipal", cerraron.
La situación en San Martín de Los Andes
"La pirotecnia está prohibida en toda la Provincia. Puede causar quemaduras, problemas auditivos, daños oculares, mutilaciones permanentes e, incluso, poner en riesgo tu vida", alarman.
Y remarcan:
ES MULTICONTAMINANTE Y PUEDE PROVOCAR INCENDIOS: Los fuegos pirotécnicos están compuestos por sulfatos, cobre, magnesio, nitratos e incluso, isótopos radioactivos que tardan de dos a tres días en disiparse, haciendo que el aire del exterior sea peligroso, particularmente para aquellas personas con algún compromiso en su sistema respiratorio, como asma u otras enfermedades pulmonares. Asimismo, el perclorato de sodio, sustancia que produce la detonación, aumenta hasta mil veces los niveles de toxicidad en el agua, afectando a los organismos que ahí habitan.
DAÑA A LOS ANIMALES: Además de contaminar el aire y el agua, el fuerte estruendo provoca una reacción de pánico y angustia en los animales, que se traduce en taquicardia, jadeos, dificultad para respirar, desorientación, temblores y, a veces, en la muerte.
PROVOCA SUFRIMIENTO EN PERSONAS CON TRASTORNO DEL ESPECTRO AUTISTA: Son hipersensibles a los sonidos y a las luces, por lo que los espectáculos de fuegos artificiales se convierten en una auténtica tortura para ellos y ellas. Su uso, tenencia, exhibición, acopio y venta deben ser denunciados.