El 4 de junio del 2011 es una fecha que quedó marcada para todos los habitantes de Villa La Angostura La erupción del volcán Puyehue iba a transformar la vida de la localidad turística neuquina por completo. Aquel día, residentes y turistas se vieron sorprendidos en su cotidianeidad por la nube de cenizas que invadió la ciudad pero rápidamente brotó la solidaridad para salir adelante.
Angostura: a 11 años de la erupción del Volcán Puyehue
Ese 4 de junio se cumplen 11 años de la erupción del Volcán Puyehue en Villa La Angostura, un suceso que marcó y cambio para siempre la vida en el pueblo.
Se trató de la actividad geológica más importante registrada en 10 mil años. La erupción del Volcán Puyehue resultó una sorpresa para todos los habitantes angosturenses que vieron cómo sus vidas cambiaron por completo en cuestión de horas. Este 4 de junio de 202 se cumplen 11 años de aquel desastre que marcó la historia del pueblo.
La erupción del volcán en primera persona
En diálogo con Diario 7 Lagos, protagonistas que vivieron en carne propia la tragedia contaron como cerca de las tres de la tarde de aquella jornada, una capa densa de ceniza cubrió toda la superficie de Villa La Angostura como consecuencia de la erupción del Volcán Puyehue y nada volvió a ser como antes.
David Tressens Ripoll, actual Presidente del Concejo Deliberante de la ciudad y quien ocupaba el cargo de secretario de Defensa Civil, dialogó con Diario 7 Lagos en el marco del 10° aniversario y rememoró detalles únicos de aquellos días: el momento en que la erupción fue un hecho y llegó la inmensa noche en plena tarde –lo que dio inició a la organización COEM- así como también los destacados lazos solidarios que comenzaron a forjarse en el pueblo.
“Nosotros, hacia entre 48 y 72 horas que habíamos leído en un diario chileno que había elevado el nivel de alerta. Es imposible vaticinar una erupción volcánica, no existe en el mundo sistema para vaticinarlo. Eso nos obligaba a tomar una serie de medidas desde el punto de Defensa Civil”, contó David.
Y explicó: “Cuando gendarmería nos dio la alerta temprana porque ya se había visto la erupción desde Samoré, justamente estábamos reunidos con Defensa Civil y con todas las instituciones que la integran. A partir de ese momento se conformó el Comité de Operaciones de Emergencia Municipal. Cruzamos al edificio de cultura y allí fue el inicio de todo”.
“Lo del Volcán fue una experiencia sorpresiva porque nadie esperaba un evento de tal magnitud”, aseguró Héctor José, vecino de Villa La Angostura, en charla exclusiva con Diario 7 Lagos.
Las cenizas que lo cubrieron todo
Ese 4 de junio de hace 10 años comenzó cómo un día normal aunque el cielo negro y con nubes bajas escondían una mala señal. “Ese día lo tomamos como un día normal y mi señora había ido a Bariloche muy temprano para ir a la peluquería”, relató Héctor. Desde la ciudad rionegrina uno puede observar cómo se encuentra el clima en Angostura y esa tarde, la mujer de Héctor vio que una tormenta se acercaba por lo que decidió emprender el regreso por la ruta.
“El primer momento fue muy difícil porque estamos hablando de un mega evento, nadie está capacitado en teoría porque supera todo lo previsible. Semejante evento de golpe, donde empiezan a caer piedras, el cielo se transforma en un solo relámpago. Hubo que pensar con el Intendente mil cosas a la vez”, expresó Tressens a este medio.
Hasta que cerca de las 15 horas, una explosión en el Volcán modificó la rutina diaria de los angosturenses. Todo comenzó con un viento muy fuerte, la lluvia se fue transformando en cenizas y luego cayeron las piedras que asustaron a los vecinos.
“Todos comenzamos a tener previsiones respecto a las casas y a cubrirlas lo máximo que se podía. La cuestión es que todo esto fue una sorpresa y la situación se fue agravando con el paso de las horas”, aseguró Héctor.
Una crisis sin precedentes en Villa La Angostura
David contó que se buscaba prever que era “lo que realmente caía del cielo, si iba a contaminar al agua. Nadie sabía realmente cuales eran las consecuencias reales de la precipitación de este tipo de material. No sabíamos de qué estaba conformado. Si podía ser tóxico, o no”.
La crisis generada por una inclemencia ambiental inesperada dio lugar a la solidaridad entre los propios pobladores. Cada uno comenzó a brindar su ayuda para que Angostura pudiera salir adelante. “Codo a codo fuimos levantando a Angostura. Fue una experiencia triste que nos dejó una enseñanza enorme”, concluyó Héctor. Hoy se cumplen 10 años de un evento que cambiaría para siempre la vida de los angosturenses.
“Fue impresionante verlos a los chicos con la naturalidad que trabajaban, toda la gente que realmente quería colaborar. Hay quienes estuvimos durante meses viviendo tanto en el COEM como en la Casa de la Cultura”, señaló Tressens, quien remarcó que está convencido que la mejor herramienta que tuvo Villa La Angostura y la sociedad fue la solidaridad: “fue lo que realmente nos posibilitó salir del desastre y de la situación que estábamos viviendo”.