Sostuvo que la elección se polariza hoy entre el MPN y Cambiemos. “Los neuquinos no permitiremos políticas de ajuste”, subrayó. Reclamó a la Nación que “respete la autonomía de la provincia” y reconozca a Neuquén por ser “tan generosa con el país durante décadas, siendo su pulmón energético”.
“El MPN no permitirá que se bajen los sueldos a los jubilados provinciales, ni que ellos ni la población sufran una política de ajuste”, enfatizó hoy la candidata a diputada nacional Alma “Chani” Sapag. Resaltó los “principios ideológicos” del partido provincial, y reclamó a la dirigencia y funcionarios del gobierno nacional “hablar con la verdad y respetar la autonomía de la provincia y el federalismo”.
Sapag, en una visita que realizó hoy a localidades de Andacollo, Tricao Malal y El Huecu del norte neuquino , remarcó la necesidad de que los neuquinos tengan en el Congreso la representatividad legislativa que garantice la defensa de los intereses provinciales para evitar “políticas de ajuste y el avance del centralismo porteño”. Como lo ha hecho históricamente –recordó-, “el MPN defenderá a los neuquinos, a sus logros de tantos años de esfuerzo, a sus proyectos y esperanzas”.
“Hoy nos quieren venir a enseñar desde Buenos Aires cómo debemos administrar nuestra caja jubilatoria, la cual está en equilibrio; mientras que la caja nacional, el ANSES, les paga 7.246$ de mínima a los jubilados. Más aún cuando estamos hablando de Neuquén, la provincia que, como pulmón energético, más aporta al país”, expresó la candidata del MPN.
Consideró que el jefe de Gabinete nacional, Marcos Peña admitió que la armonización previsional es un tema de agenda del gobierno nacional. “Fue muy claro cuando dijo que la armonización de la caja jubilatoria ´es algo que tenemos que sentarnos en una mesa a discutir´. Eso es lo que realmente piensan los dirigentes porteños y sus delegados en Neuqúen”, reclamó.
“Neuquén no necesita armonizar su caja, aun cuando se nos quiera imponer desde Buenos Aires con amenazas veladas de desfinanciarnos. Nuestra caja del ISSN no tiene déficit, está equilibrada por mérito de los trabajadores y del gobierno provincial, porque son ellos quienes hacen sus aportes mes a mes para que esto suceda”, indicó.
“En todo caso, y según el relato de Buenos Aires, quien debería entregar su caja jubilatoria al ANSES es el Municipio capitalino, que tiene su caja quebrada, fundida con un déficit anual de 75 millones de pesos”, opinó.
Sapag recordó que la armonización previsional implica la rebaja del porcentaje de 80 por ciento móvil que perciben los jubilados neuquinos y el aumento de la edad jubilatoria, hoy establecida en Neuquén en 55 años para las mujeres y 60 para los hombres, con 30 años de aportes al sistema.
“Lo que tenemos que debatir es cómo se compensa el aporte que Neuquén hace a la Nación desde hace décadas, siendo su pulmón energético. No se trata de recortarle, sino de reconocer a esta provincia lo que le corresponde por ser tan generosa con el resto del país”, expresó.
Consideró que con estas políticas, “los partidos nacionales –independientemente de cuál ocupe la Casa Rosada- demuestran la falta de respeto a las autonomías provinciales y el avasallamiento del federalismo”.
Sapag expresó que la elección “se polariza hoy entre Cambiemos y el Movimiento Popular Neuquino, porque los neuquinos son conscientes que se viene una discusión dura, fuerte, por los recursos que son de ellos. Y que ante esas discusiones que se van a venir, necesitamos fortalecer a nuestro gobernador con representantes en Buenos Aires que defiendan a Neuquén y a los neuquinos”.
“Es Nación quien le debe a Neuquén. Nos quitó en 2006 el 15% de la coparticipación nacional para financiar las cajas que habían nacionalizado en los ’90 y por lo cual la Corte definió que nos tenían que devolver ese dinero. Una vez más, vienen desde Buenos Aires a decirnos cómo debemos administrar nuestros recursos, mientras nos quieren quitar 1.200 millones de pesos anuales para destinarlos al Fondo del Conurbano Bonaerense, lo que podría implicar reducir los salarios estatales; cerrar hospitales, escuelas o dejar de hacer obras. Y no lo digo yo, lo dijo el Jefe de Gabinete al admitir que “es todo parte de la discusión integral que tenemos que dar”, precisó.