La entidad dió a conocer los resultados de un relevamiento propio del sector gastronómico (FEHGRA) que revela que la rentabilidad de un restaurante tipo empeoró en 0,6% de las ventas, permaneciendo en terreno negativo por 11 meses consecutivos.
Alarma en la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica de Neuquén: Once meses negativos para el sector
Al analizar la relación flujo neto / ingresos de un restaurante familiar de 240 cubiertos, dos turnos y medio de trabajo en ciudad capital en el resto del país, se ha podido extraer que su rentabilidad sobre el total de ventas empeoró 0,6% puntos porcentuales respecto al mes de julio, permaneciendo así, en terreno negativo por 11 meses consecutivos.
El empeoramiento de la rentabilidad es explicado por una fuerte suba de los costos de mercadería vendida impulsados por la suba de precios de alimentos y bebidas, proceso que se disparó sobre todo después de la PASO en el mes de agosto. Además, se observó una suba de los costos financieros, de cobranzas, de los costos administrativos y de comercialización. El costo de tarifas de servicios públicos y otros gastos de explotación se vieron disminuidos en el mes de agosto tras el congelamiento impuesto por el gobierno de Macri.
Para lograr una rentabilidad nula, es decir, dejar de perder capital con un restaurante de este tipo, los precios de ventas deberían haber subido un 4,87% manteniendo el mismo nivel de ventas.
La actividad gastronómica 100% declarada y en blanco es difícil en las condiciones actuales a pesar del impacto positivo registrado por el turismo extranjero y el aumento de frecuencias de vuelos que llegan a la provincia.
Un inversor que tiene un restaurante tipo se encuentra en continua descapitalización hace 11 meses y la suba de precios que se viene imponiendo este fin de año deja un panorama vidrioso de cara al futuro. Tampoco es rentable, bajo el contexto actual, abrir un nuevo negocio gastronómico, dando claros desincentivos a la inversión en el sector.
Cabe recordar que la hotelería y gastronomía es una industria dinámica que genera ingresos genuinos y brinda mano de obra directa e intensiva. Necesitamos que haya políticas claras que permitan al sector recuperar su senda de crecimiento y el consecuente aporte a la economía del país.